Andrés Manuel López Obrador goza del afecto y simpatía de miles de tabasqueños. De eso no cabe la menor duda, pues de otra manera no podría explicarse el hecho del llamado "efecto AMLO" y de que recientemente más de 510,000 ciudadanos de esta parte de México votaran por él en las urnas electorales y muchos continúen respaldándolo aún.
Desde luego que Andrés Manuel López Obrador es una persona querida en Tabasco por la mayoría de tabasqueños (aunque desde luego hayan quienes no lo quieran, que habrá que reconocerlo, son los menos). Aquí está su casa, aquí nació, aquí trabajó, aquí sirvió a miles de paisanos. ¿Porqué no lo habría de querer la paisanada y porqué no lo habría de recibir con los brazos abiertos cuando él decidiera venir a la entidad, bien para atender cuestiones personales o familiares o para participar activamente en las contiendas políticas que se desarrollen?
López Obrador siempre será bienvenido a su casa. ¿A título de qué alguien podría oponerse a que llegue al estado y a que participe en los procesos políticos-electorales? ¿No acaso ese es un derecho que tienen todos los ciudadanos tabasqueños y que por lo mismo pueden ejercer libremente cuando les venga en gana?
No obstante el señor Efraín García Mora, en su calidad de presidente de la CMIC –aunque luego aclarara haberlo hecho a nombre propio en razón de que otros socios de esa cámara se deslindaran del manifiesto y lo dejaran en evidencia--, tras repudiar el tabasqueñismo de Andrés Manuel y catalogarlo de chilango, mofarse de él por su designación de "presidente legítimo", cuestionar su ejercicio al frente del gobierno del D.F., acusarlo de contradictorio, de falto de autoridad moral, de "habernos" engañado, prácticamente, bajo una supuesta bienvenida, casi le exige que no se meta en nuestros asuntos "porque esos los tabasqueños los podemos arreglar solos" y que nos "deje solos".
¿En calidad de qué el señor García Mora se atribuye el derecho de decidir que tabasqueño puede venir a Tabasco y cuál no y oponerse públicamente a la vista de Andrés Manuel López Obrador, al que le augura "el desplome" de su persona y de su partido? La presidencia de la CMIC no le da ese privilegio, como tampoco su propio "título personal". Este es un exceso de su parte que en nada contribuye al ambiente de conciliación y armonía que debe prevalecer en el estado.
El propio señor García Mora le dice a AMLO que "no queremos que los dineros del pueblo caminen por toda la república mexicana en proyectos políticos personales", cuando antes nunca tuvo el valor de decirle esto a Roberto Madrazo, que para esos fines sí usó grandes cantidades del erario, como se hizo del dominio público.
No, señor García Mora, usted no es la voz de los tabasqueños. Usted no tiene derecho a decir quien entra a Tabasco y quien no, ni tampoco a juzgar con tamaña severidad –como lo hace-- a un paisano, como Andrés Manuel, que siempre será bienvenido a nuestro estado.
fcoperalta42@hotmail.com
Por Francisco Peralta Burelo
Villahermosa, Tabasco
TABASCO HOY
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